La Cámara de Importadores de la República Argentina (CIRA) realizó un informe sobre la última reunión de alto nivel entre el Mercosur y la Unión Europea, en julio pasado, como parte de las negociaciones para lograr un acuerdo de asociación integral.

“Se ratificó el objetivo de continuar la negociación para alcanzar un acuerdo que incluya compromisos en el campo de la integración con apertura de mercado”, destaca la CIRA, tras agregar que “se ratificaron las posiciones negociadoras, aun cuando subsisten diferencias importantes en temas de interés para ambas partes”.

El programa de liberación comercial contempla un universo del 90% del comercio regional. No obstante, “por el lado europeo, en el sector agrícola el ofrecimiento implica cupos que limitan la importación, y todavía existen diferencias en cuanto a las cantidades ofrecidas por la UE, consideradas insuficientes por el Mercosur”.

La UE habría ofertado un aumento del cupo de las importaciones de carnes vacunas, en tanto en el sector automotriz, si bien el Mercosur presentó una oferta que permitió avanzar en la negociación, “la misma no está cerrada, en particular en lo que se refiere al comercio de autopartes”.

El régimen de origen continua siendo sigue siendo tema de diferencias en lo que respecto a los criterios que se aplicarán cuando se usen insumos extrarregionales para calificar el grado de transformación que amerite la aplicación de los tratamientos preferenciales.

“Su aplicación está relacionada con la vigencia de las llamadas cadenas globales de valor y el régimen paneuropeo de origen, que puede generar desvío de comercio y perjuicio en sectores productivos del Mercosur”, indicé el trabajo de la CIRA.

En cuanto a los sistemas de certificación, el Mercosur ofrecerá una propuesta que implique en algunos casos su propuesta como bloque y, en otros, las exigencias del criterio europeo.

“Otro aspecto conflictivo tiene que ver con la propiedad intelectual, un tema sensible para algunos sectores como el de los medicamentos. En el caso de las indicaciones geográficas, que afecta a algunos sectores de alimentos, si bien se redujeron las diferencias todavía subsisten casos conflictivos, sobre todo en el sector lácteo y en el de vinos”, apunta la CIRA.

La reunión no trató temas como los servicios vinculados al transporte marítimo, la pesca, las compras públicas y los regímenes especiales de importación.

“Se decidió continuar con las negociaciones luego del receso europeo de agosto, probablemente a fines de setiembre o comienzos de octubre. Como puede apreciarse, los tiempos para la conclusión satisfactoria de las negociaciones durante este año se acortan, aún más teniendo en cuenta el contexto regional, en particular las elecciones presidenciales que se llevarán a cabo en Brasil en el próximo mes de noviembre”, concluye el trabajo de la CIRA.