El comercio con Brasil fue superavitario en US$ 184 millones durante marzo gracias a un aumento de 12,2% de las exportaciones y una caída de las importaciones de 53,3%, en términos interanuales.
Una combinación de la devaluación del tipo de cambio y mayores excedentes exportables determinaron el comportamiento de las ventas externas a Brasil, analizó Ecolatina, y puntualizó que los vehículos de carga, el trigo y el combustible marcaron la tendencia.
En materia de importaciones, la retracción se debió a la recesión económica y a un nivel de actividad que en términos interanuales se mantiene en rojo. Las principales caídas en las compras externas se verificaron en vehículos de pasajeros y carga, autopartes, maquinaria agrícola y laminados de hierro.
“Proyectamos que el intercambio bilateral continuará en recuperación para nuestro país, aunque esta dinámica iría paulatinamente mostrando signos de desaceleración”, señaló Ecolatina en su informe mensual, tras agregar que el año cerraría con una balanza comercial “prácticamente equilibrada” con un déficit de apenas US$ 100 millones con Brasil, de la mano de mayores exportaciones (9%) y una caída de las compras (-18%).
“Hay un factor adicional a tener en cuenta: el mercado brasilero ha reducido sus expectativas de crecimiento para 2019 (de 2,5% a 2%), lo cual indica que su demanda podría no mostrar crecimientos tan significativos como los proyectados algunos meses atrás”, ampliaron desde Ecolatina.
Comercio bilateral de marzo
Comercio acumulado
No tan desalentador
En tanto, la consultora Abeceb destacó que el superávit de US$ 184 millones es el cuarto consecutivo que se registra en el intercambio con Brasil, y lo contrasta con el déficit de US$ 830 millones de marzo de 2018.
En cuanto a las exportaciones de vehículos, destaca que “nuestro principal rubro de exportaciones a Brasil, material de transporte terrestre, se revirtió desde un desplome del 44,7% en enero, a una tasa positiva del 15,7% en febrero”.
Respecto de las importaciones, la consultora también atribuye la caída a la débil actividad económica argentina, y “a un tipo de cambio real que promedió en marzo un alza interanual de 19,1%”.
“En nuestra lectura –continúa Abeceb– el cuadro general de la economía brasileña no es tan desalentador, aunque la incertidumbre sobre cuándo se aprobará la reforma previsional impulsada por el nuevo gobierno puede impactar en la economía”, indicaron, al tiempo que también pusieron el foco en la reducción de las perspectivas de crecimiento en la economía del país vecino.
A su turno, el análisis de las cifras de comercio bilateral realizado por la Cámara Argentina de Comercio y Servicios valora que el superávit comercial de marzo con Brasil representa un incremento del 411% respecto del mes anterior.
“La Argentina se posicionó en tercer lugar entre los mayores proveedores de Brasil, por debajo de China (US$ 2567 millones) y Estados Unidos (US$ 2179 millones)”, explicó la CAC. Idéntica situación se dio en cuanto a los países compradores: la Argentina quedó tercera detrás de China (US$ 5557 millones) y Estados Unidos (US$ 2244 millones).
“Las exportaciones de Brasil al mundo disminuyeron un 10,4% interanual en marzo, al pasar de US$ 20.229 millones en 2018 a US$ 18.120 millones en 2019. A su vez, las importaciones totales disminuyeron, en dicho mes, un 4,9% respecto a las registradas hace un año (US$ 13.809 millones en 2018 vs. US$ 13.130 millones este año). En este contexto, el resultado comercial fue un superávit de US$ 4990 millones para el principal socio comercial de Argentina, que implicó una baja de 22,3% interanual (US$ 6420 millones había sido en marzo de 2018)”, concluyó la CAC.