ROSARIO, Santa Fe.- El 9° Encuentro Nacional de Despachantes de Aduana arrancó con una buena noticia que ayuda a sobrellevar un contexto de dificultades y de redefinición de la profesión cuya existencia, como pocas veces, está siendo cuestionada tanto en el plano local como en el internacional.
Se trata del proyecto de ley para la creación del Colegio Público de Despachantes de Aduana, el viejo sueño de la colegiatura de los auxiliares del servicio aduanero que ya había recorrido los pasillos del Congreso hace poco más de dos años y cuyo debate quedó empantanado en comisiones, y que luego perdió estado parlamentario.
“Ya ingresó en el Senado el proyecto de ley presentado por la senadora Silvia Giacoppo (UCR-Jujuy) y el senador Alfredo Luenzo (Chubut Somos Todos), que mancomunaron esfuerzos para elevar en conjunto el proyecto”, señaló el secretario del Centro Despachantes de Aduana (CDA), Marcelo Rávida, durante la inauguración oficial del encuentro.
Desde el despacho del senador Luenzo confirmaron a Trade News la presentación del proyecto en el recinto en estos días. “No es el mismo proyecto que ya estuvo en Diputados y que perdió estado parlamentario. Lo tomamos con el senador Luenzo, realizamos algunos cambios y lo presentamos junto con Giacoppo”, indicaron fuentes cercanas a senador chubutense.
El proyecto
La creación de un Colegio Público de Despachantes de Aduana no sólo dotará de un nivel institucional mayor a la actividad, a la par del resto de las profesiones colegiadas, sino que permitirá normar sobre cuestiones como los honorarios por los servicios prestados, entre otros puntos que hacen al desarrollo laboral.
Entre sus funciones, además de la matrícula para los profesionales, se cuentan la posibilidad de “prestar a favor de sus miembros las garantías o avales” tal como lo establece el Código Aduanero; dictar las normas de ética “y el régimen sancionatorio por inobservancia”, y tutelar la actividad “impidiendo el desempeño de las funciones de despachantes de aduana por parte de personas sin título habilitante o no matriculadas”.
Establece además los órganos que integrarán el Colegio: la asamblea de delegados, el consejo directivo, el tribunal de disciplina y la junta electoral.
En los fundamentos del proyecto, Giacoppo y Luenzo reconocen un “largo camino” que llevan adelante los despachantes de aduana en la “lucha por la jerarquización profesional” de la actividad.
“Este proyecto es un objetivo largamente anhelado por los despachantes de aduana, quienes cumplen un rol de suma importancia en el campo del comercio internacional ya que, como auxiliares del comercio y del servicio aduanero, son desde la sanción de la ley 22.415 (Código Aduanero), nexo insustituible entre la actividad privada y el Estado”, argumentan los senadores.
Problemáticas
Los despachantes de todo el país coinciden en Rosario par analizar las problemáticas y desafíos de la profesión. “Hemos posicionado al CDA en el centro del comercio exterior. Nos costó mucho trabajo pero reabrimos muchas puertas que estaban cerradas y afianzamos todavía más las que estaban abiertas”, indició el vicepresidente del organismo, Pablo Pardal.
El CDA cuenta en todo el país con 3615 despachantes asociados, y una gran parte de su agenda se centra en su rol institucional, en tanto cuerpo que aspira a colegiarse como entidad que defiende los intereses de los profesionales, que atraviesan un presente donde su actividad es cuestionada por múltiples frentes.
De hecho, mientras desde algunos sectores se busca catalogarlos como “un costo” que puede prescindirse y muchas veces son tildados de “burócratas” cuando en realidad sólo cumplen con los procesos fijados por el Estado, desde otros frentes se mella su trabajo con una competencia desleal de la mano de terceros que documentan operaciones sin tener que acreditar conocimientos y obligaciones.
Uno de los principales temas de conversación en los pabellones de Puerto Norte es, sin dudas, las derivaciones de las resoluciones que permiten, por un lado, exportaciones simplificadas, y por el otro, importaciones vía courier por mayores montos. En ambos casos, la figura del despachantes se ve perjudicada por una narrativa que parece oponerlos a la “facilitación del comercio” cuando ellos, como auxiliares de la Aduana, advierten sobre un relajo en el control.