El impacto que puede generar la salida del Reino Unido de la Unión Europea en el comercio exterior con América latina fue objeto de un estudio de percepciones entre empresarios y gerentes regionales, y reveló que al menos dos tercios de los encuestados confían en que el Reino Unido será una economía más fuerte tras el Brexit.
El estudio fue desarrollado por la agencia de comunicaciones y relaciones públicas británica Sherlock Communications –fundada en 2013 en San Pablo, Brasil– junto con Toluna Insights, y consistió en entrevistas a más de 3000 ejecutivos de la Argentina, Brasil, Chile, Colombia, México y Perú.
Entre las principales revelaciones, se destacó el hecho de que más del 63% de los dueños de negocios y tomadores de decisiones, cuando se les preguntó si creían que, al abandonar la Unión Europea, el Reino Unido sería más fuerte o más débil a nivel internacional, respondieron “más fuerte”. Y mientras un 12% demostró indiferencia, un 31% de los encuestados cree que el Brexit dará lugar a un mundo más peligroso e inestable.

Alasdair Townsend
Alasdair Townsend, cofundador de Sherlock Communications, cree que la influencia del poder blando del Reino Unido no debe ser subestimada. “La razón por la que mucha gente cree que habrá oportunidades para Gran Bretaña en un mundo posterior al Brexit se reduce a lo que podríamos llamar marca británica” señaló, tras agregar que “la cultura británica y su poder suave en la región son, en realidad, extremadamente fuertes y bien recibidos”.
Marcas como el fútbol de la Premier League, la serie The Crown en Netflix o The Beatles están fuertemente instaladas en el ideario latinoamericano, “y eso también se aplica a las empresas”, explica la agencia, luego de señalar que “la gente ve a las empresas británicas como confiables, innovadoras y excelentes para el comercio, por lo que hay oportunidades reales para capitalizarlas”.
Relaciones bilaterales
En 2016, la Argentina fue el cuarto mayor mercado de exportación del Reino Unido en América del Sur. Las importaciones argentinas sumaron US$ 792 millones, y se concentraron en equipos médicos y productos farmacéuticos. La Argentina, por su parte, exporta principalmente alimentos.
“El acuerdo con la UE tiene muchas reglas, mientras que un acuerdo con el Reino Unido podría centrarse más en el comercio y la inversión”, explicó Amancio Nunes, profesor de comercio internacional de la Universidad de São Paulo.
“El Mercosur también ha sido criticado por su falta de acuerdos bilaterales. México, Chile y Canadá tienen muchos acuerdos bilaterales, mientras que Mercosur no tiene acuerdos comerciales importantes en vigor. La gran oportunidad entonces es promover un acuerdo bilateral con el Reino Unido, si, por supuesto, ellos tienen interés en ir en esa dirección”, apuntó.
Otro punto que surgió en la encuesta se vinculó al trato con los inmigrantes, y allí los argentinos fueron claros en sus opiniones en cuanto a política exterior: más del 40% cree que el gobierno británico no trata a los inmigrantes de manera justa y otro 34% cree que la política de inmigración del Reino Unido afecta negativamente a dicho país para vender sus productos y servicios.
En términos monetarios, tales hallazgos no constituyen una lectura agradable para el gobierno británico, dado que el 12% de los argentinos decidió renunciar al Reino Unido por productos y servicios.
La negatividad en torno al debate sobre la inmigración debería proporcionar una preocupación genuina para las empresas británicas, ya que estos consumidores son los mismos que podrían impulsar el intercambio comercial post Brexit.

Patrick O´Neill
“La necesidad de comunicar con claridad y seguridad a los latinoamericanos sobre el potencial y el futuro del Reino Unido es primordial”, destacó la consultora Sherlock Communications.
“La investigación muestra claramente que hay un sentimiento positivo en América Latina hacia Reino Unido y las marcas británicas, sin embargo, sería un error que las empresas confiaran únicamente en esta herencia”, resalta Patrick O’Neill, cofundador de Sherlock Communications.
“A la luz del hecho de que naciones como China y otros países europeos y norteamericanos están realmente compitiendo para crecer en todo el mercado latinoamericano, es imperativo que las empresas británicas comuniquen los beneficios reales de establecer relaciones comerciales”, concluyeron.