CÓRDOBA (Enviado especial).– Diego Dávila habló por primera vez en público desde que asumió como director general de Aduanas.
Lo hizo en el seminario Gestión Coordinado de Fronteras, el primero de una serie de capacitaciones que surgieron por iniciativa de la Cámara de Importadores de la República Argentina (CIRA), que contactó a la Oficina Regional de Fortalecimiento de las Capacidades de la Organización Mundial de Aduanas (OMA) para “bajar” las mejores prácticas y recomendaciones a las administraciones aduaneras de la región.
Hay una regla nemotécnica fundamental para identificar a Diego Dávila: las dos “D” de su nombre ayudan a memorizar fácilmente su misión: desburocratizar y despapelizar la Aduana.
“Lo que determinó el presidente Macri para esta gestión es la simplificación”, señaló el hombre llegado directamente de la columna vertebral de la Jefatura de Gabinete, donde compartía espacios con Marcos Peña, Mario Quintana y Gustavo Lopetegui.
“Queremos una Aduana moderna e ir hacia un modelo mucho más fácil en todo sentido. Pero fácil no quiere decir lo que en términos futbolísticos es un “siga-siga”, indicó.
Para Dávila, hay que llegar a la “perfección del comercio exterior ágil” porque “Macri tiene muy claro que para el desarrollo económico de la Argentina lo principal es el desarrollo del comercio exterior. Y tenemos que mejorar muchas prácticas para esto, necesitamos mentes disruptivas, gente capaz de dar una visión diferente”, apuntó.
“En la gestión que me corresponde, en los próximos años, nos vamos a enfocar específicamente en la facilitación del comercio, desburocratizando, generando información previa. Y es una responsabilidad de todos, el sector público y el privado”, destacó Dávila.

Diego Dávila, director general de Aduanas, junto con Agustín Laurnagaray, Felipe Viramonte Noguer y Virginia Garimaldi (asesores); Pablo D´Errico (director de la Dirección Regional Aduanera Central), y de espaldas, Pablo Allievi (subdirector de Control Aduanero).
Dávila llegó acompañado de prácticamente todo su equipo de asesores, entre ellos, Agustín Laurnagaray, Felipe Viramonte Noguer y Virgina Garimaldi. Asimismo, acompañó también durante toda la jornada Pablo Allievi, el subdirector de Control Aduanero.
El director de Aduanas anticipó cuál será una de las primeras obsesiones por instrumentar: el operador económico autorizado (OEA), justamente, motivo del próximo seminario que organizarán la CIRA y la OMA.
“Necesitamos una cadena logística que genere confianza, donde se pueda exportar e importar ágilmente, sin papeles, eliminando la discrecionalidad, ganando transparencia. En este marco desarrollaremos el operador económico autorizado”, explicó.
“El OEA es el futuro del comercio exterior. Trazamos un plan a 6 años dentro del contexto de la ventanilla única del comercio exterior argentino (Vucea), y empezamos con pruebas pilotos en la industria automotriz, a lo que seguirá luego experiencias con aduanas domiciliarias”, destacó Dávila.
Parte de ese plan es tener 50 compañías certificadas como OEA en 2018. En la actualidad no hay ninguno.
La Unión Europea cuenta con 20.000 OEA, Estados Unidos 11.000, Canadá poco más de 1500, México 64 y Brasil alrededor de 100, enumeró Dávila.
“Tenemos que tener en claro que no vamos a poder operar en comercio exterior si no estamos certificados como OEA. Estados Unidos, para poder operar con nosotros manda gente para que certifique la seguridad de la cadena logística hasta que la mercadería llega a Estados Unidos”, ejemplificó.
Control
Junto con la facilitación y el reconocimiento mutuo sellado con otras aduanas, Dávila se refirió al control.
“Control no es controlar más, o controlar todo. Ya nos dimos cuenta que eso no genera impactos positivos. Seguimos haciendo las mismas cosas con los mismos resultados”, señaló.
El discurso oficial, no importa el administrador que esté, sigue una misma línea: gestión de riesgo inteligente. La puesta en práctica, o lo que perciben los administrados, todavía está lejos del mensaje que escuchan.
“Necesitamos una gestión de riesgo completamente distinta y más inteligente. En esto haremos foco en los próximos años, y nada de esto podrá ser posible si no se acompaña con el desarrollo de la tecnología aplicada”, prometió Dávila.

Diego Dávila, director general de Aduanas
“Si no nos adaptamos, el mundo nos lleva puestos y nos quedamos retrasados, a la cola de cualquier tipo de negociación que exista en el mundo”, advirtió.
Para darle soporte al discurso, listó cómo el Gobierno puso en marcha el discurso: un Ministerio de Modernización para universalizar la gestión documental electrónica y los trámites a distancia.
“Tenemos instituciones y entes prehistórica y una tecnología que es de los dioses y al alcance de la mano. No es para sustituir gente, sino para permitirle a esta gente que esté en servicios diferentes donde no se puede prescindir del factor humano”, señaló.
“Pero allí donde hayan cosas que puedan resolverse con Inteligencia Artificial, a través de datos predictivos que nos permitan ser más eficientes, allí estará el objetivo de la Aduana”, proyectó el funcionario.
Plan a 6 años
“En 6 años tenemos que tener las 350 empresas que representan el 75% del comercio exterior operando de manera simple con una menor participación del control aduanero”, aseveró.
La coordinación entre terceros organismos, el consenso (en la medida de lo posible) en que desarrollar el comercio exterior es desarrollar la economía y hacer más competitivas a las empresas serán medulares condiciones sine qua non para que el sector privado no esté nuevamente frente a conceptos vacíos de contenido.
“La Aduana tiene y tendrá un rol protagónico. Estamos dispuestos a jugarnos y cambiar el statu quo en el que venimos paralizados para insertarnos en el mundo, y para ser una aduana modelo que permita el desarrollo del comercio exterior de grandes, pymes y emprendedores”, dijo Dávila, mostrando cómo también la Aduana tiene su parte en las directivas de Macri: más trabajo y menos pobreza.
“Eso nos va a hacer grandes, e insertar en el primer mundo”, concluyó el funcionario.
Dávila habló ante Leonardo Trentini, funcionario de la Aduana de Uruguay y director de la Oficina Regional de Fortalecimiento de las Capacidades, de la OMA, y Luis Raul Montaño Hernandez, oficial de la OMA y del SAT (Servicio de Administración Tributaria de Mexico). Participaron las autoridades de la CIRA Rubén García (presidente), Fernando Furci (gerente general), Alejandro Manoukian (secretario) y Darío Pisani (prosecretario), y la vicerrectora académica de la Universidad Siglo 21, de Córdoba, en cuyo campus se desarrolló el evento que se transmitió vía streaming.