Mientras las empresas que operan en comercio exterior encuentran serios inconvenientes para obtener aprobaciones tanto de permisos como de acceso al mercado de cambios para abastecerse de los insumos necesarios para sus líneas de producción, la Aduana detectó operaciones de sobrefacturación -una maniobra ilegal que permite girar más dólares de lo debido en una operación de importación- por US$ 22 millones en la compra de 32 aeronaves al exterior.

El organismo que dirige Guillermo Michel, a partir de los acuerdos con aduanas de terceros países que le permite acceder a la documentación presentada al momento de registrar exportaciones en el exterior con destino a la Argentina, realizó un relevamiento en la importación de aviones privados entre enero de 2022 y la actualidad. Los pedidos de información realizados al exterior derivaron en una denuncia radicada en el Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Federal N°4, a cargo del Juez Ariel Lijo, que tramita la causa 367/22 sobre la sobrefacturación de 32 aviones. 

Diferencia sustancial

Sucede que los valores documentados por los importadores ante la Aduana argentina “diferían sustancialmente de los valores de mercado”, dato que es fácilmente verificable con los pedidos de documentación con las aduanas de origen.

 “Hasta el momento la Aduana ha cursado alrededor de 140 requerimientos e identificó múltiples casos en los que sospecha que habría habido maniobras de sobrefacturación: los valores documentados por los importadores ante la Aduana diferían sustancialmente de los valores de mercado. A la luz de las reglamentaciones que rigen la política cambiaria, las operaciones en cuestión habrían generado un egreso significativo e indebido de divisas, en perjuicio de las arcas del Estado Nacional”, indicó la Aduana en un comunicado.

Por ello, el juzgado interviniente ordenó efectuar diversos allanamientos sobre 32 aeronaves importadas, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y las provincias de Buenos Aires, Córdoba, Mendoza, Santa Fe y Tucumán.