La consultora especializada en comercio exterior Abeceb difundió un nuevo análisis de la balanza de exportaciones e importaciones argentinas según datos difundidos por el Intercambio Comercial Argentino (ICA) del INDEC.

Los números que julio pasado se transformó en el 19° mes consecutivo de déficit comercial, con un rojo de US$ 789 millones, con exportaciones creciendo 1,7% interanual e importaciones en aumento en 2,2%.

“Hay que contemplar la situación del sector agropecuario. Por el lado de las exportaciones, los productos primarios y las manufacturas de origen agropecuario componen el grueso de la incidencia negativa, a cuenta del desplome de las ventas externas de los productos derivados de soja; por el lado de las importaciones vemos que entre las principales subas a nivel producto figuran ya algunos insumos del sector agropecuario (química inorgánica, abonos)”, destaca el informe.

En cuanto a precios y cantidades, los valores de las exportaciones reflejaron un aumento del 11,1% mientras que los volúmenes se deplomaron un 8,4%, “consistente con la reducción en los volúmenes exportados del agro”.

Respecto de las importaciones, cayeron las cantidades (4,0%) mientras que los precios subieron 6,5% respecto de julio de 2017.

“La situación atípica que enfrenta la matriz productiva argentina se refleja en la heterogeneidad de la dinámica de las exportaciones por rubros.  La variación en el valor de las exportaciones en julio estuvo inducido por la contracción de las exportaciones de productos primarios (-23,3%) y manufacturas de origen agropecuarios (-2,8%), lo que contrasta con la buena dinámica de manufacturas de origen industrial (+14,5%) y el “colchón” que dieron las mayores ventas de combustibles y energía (+199,1%), dado el incentivo de precios que recibieron las ventas de crudo pesado de la Patagonia”, explicaron desde Abeceb.

En cuanto a las compras externas, crecieron los bienes intermedios (20,5%), combustibles y lubricantes (37,4%) y bienes de consumos (7,9%). Por su parte, cayeron 20,6% las compras de bienes de capital; 7,8% las piezas y accesorios para bienes de capital, y 19,1% las de vehículos automotores de pasajeros.

“Viendo la serie desestacionalizada (las importaciones cayeron 1,5% frente a junio y las exportaciones subieron 0,8%) también se encuentra evidencia de que el ajuste externo se seguirá acentuando hacia fin de año. Con todo, auguramos que la balanza comercial del segundo semestre estará a grandes rasgos equilibrada, por lo que el rojo a diciembre no oscilará muy lejos de los actuales US$ 5100 millones del primer semestre”, agregaron.