La aprobación de una nueva tasa de seguridad para todos los vuelos de cabotaje, regionales e internacionales, destinada a financiar a la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA), generó un fuerte rechazo en las organizaciones del sector aéreo, que consideran que la medida incluida en el Presupuesto sólo empeora la falta de competitividad de nuestro país, el que más grava a la actividad en la región y uno de los que más lo hace a nivel global.

La Asociación Latinoamericana y del Caribe de Transporte Aéreo (ALTA), emitió un comunicado en el que sostiene que la Argentina es el país que más grava la actividad aérea en la región, encareciendo sustancialmente la tarifa del ticket aéreo que debe pagar el viajero, en ocasiones hasta duplicando la tarifa base que cubre la operación aérea.

Y a continuación detalla que un boleto emitido en la Argentina, en pesos, tiene un total de 7 tasas e impuestos:

  • Tasa de uso de aeropuerto (US$57)
  • Tasa de migraciones y aduana (US$10)
  • Tasa de seguridad (US$8)
  • Impuesto a las ganancias (45%)
  • Impuesto país (30%)
  • Retención al impuesto a las ganancias (5%)
  • Impuesto de la Dirección Nacional de Turismo (7%) + 25% “dólar Qatar” y ahora Impuesto PSA

Responsabilidad estatal

La Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA), por su parte, manifestó su rechazo a la medida argumentando que la seguridad en la aviación civil es una responsabilidad del Estado y tal como recomienda la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI), es el mismo Estado quien debe cubrir con ese costo, sin trasladárselo al pasajero.

“Actualmente, la ANAC cobra una tasa de seguridad de US$8, además de un sinfín de tasas e impuestos sobre los boletos aéreos que hacen que el sector en Argentina sea una de los más gravadas en el mundo, tanto del lado de los pasajeros como para las empresas que prestan el servicio. Por nombrar algunas, la tasa de seguridad de ANAC, el uso de aerostación, migraciones, aduana, impuesto al turismo del 7%, impuestos de AFIP. En estos momentos el 54% del valor total de un boleto aéreo que paga el pasajero en Argentina corresponden a tasas”, dijeron desde IATA.

Aporte económico y social

ALTA destacó el aporte económico y social del sector aéreo. “Argentina es un país con más de 22,4 millones de pasajeros anuales (prepandemia), que generan 329.000 empleos directos en el país y el 2,1% del PBI”, señalan desde la organización.

“Este nuevo impuesto agrava aún más la reducida competitividad del país para atraer viajeros que disfruten de la rica cultura, las bellezas naturales y el ambiente de negocios. Se trata de una extensa cadena de valor que pierde grandes oportunidades para generar bienestar socioeconómico a la población”, explican.

José Ricardo Botelho, director ejecutivo y CEO de ALTA, comentó que existen buenas prácticas y ejemplos concretos que demuestran cómo una tributación equilibrada y eficiente atrae viajeros internacionales y nacionales, activa múltiples industrias y genera mayores ingresos para el Estado y la población. “Es importante recalcar que la aviación es una de las industrias más gravadas mundialmente y en Argentina lo es aún más”, enfatizó.

Desde el sector aéreo destacan que “el inmenso valor socioeconómico que activa la aviación no sólo viene del viajero internacional y el turista. El ciudadano que desea visitar familiares y amigos, el comerciante que necesita viajar a otras provincias para generar negocios que sustentan a su familia, la persona que necesita atención médica urgente son algunos ejemplos de viajeros domésticos o de cabotaje que requieren el servicio esencial que presta la aviación, especialmente en países continentales como la Argentina. Poner más costos es poner más barreras a un servicio esencial”.

Aeropuerto Ezeiza. Imagen Christian Córdova.

Advertencia

“Desde ALTA reiteramos que cada país tiene poder de decisión y lo respetamos, pero como asociación regional que representa cerca del 80% del tráfico aéreo en la región nos vemos en la obligación de alertar sobre el reto y el impacto negativo que representa incrementar los gravámenes al transporte aéreo, que impactan directamente a la población”, señala el comunicado.

Y añade que la organización se pone a disposición de las autoridades pertinentes para brindar datos y apoyo técnico, aportar buenas prácticas regionales e internacionales que permitan contribuir a los servicios que recibe la actividad aeronáutica de manera eficiente y sustentable, de una manera que promueva la cantidad de vuelos y pasajeros y genere más beneficios para el país. “Esperamos que las autoridades oigan a la industria que conecta al país, que lleva oportunidades incluso a lugares remotos, que promueve la cultura argentina y que genera negocios”, concluye el comunicado de ALTA.

Multiplicar por 8 y por 3

Operar en la Argentina es mucho más costoso que en cualquier país de la región. Los costos de navegación área son 8 veces más caro que en Chile y los costos de aterrizaje son casi el triple comparado con Paraguay (basado en un avión Airbus A320-200), dijeron en IATA.

IATA

“Esta política recurrente de gravar a la industria se está haciendo insostenible. La aviación ha demostrado su compromiso con el Gobierno para trabajar en conjunto, con efectividad y visión en la sostenibilidad del transporte aéreo en la Argentina tras la pandemia, donde nuestros pronósticos estiman la recuperación de los niveles 2019 para 2024. Pero en lugar de facilitar este proceso, el Gobierno impone más obstáculos. Aprobar dos nuevas tasas en tan sólo dos semanas es un golpe paralizante para la industria y principalmente para todos los ciudadanos. Argentina ya está plagada de impuestos y tasas injustificables que perjudican la demanda de los viajes aéreos y en definitiva inhiben el desarrollo del país”, dijo Peter Cerdá, vicepresidente regional de IATA para las Américas.

El comunicado de IATA recuerda que este mes se celebraron dos encuentros claves de la industria en la Argentina –la cumbre anual de Airports Council International Latin America and Caribbean (ACI-LAC) y de la ALTA, que congregaron autoridades del Gobierno y representantes de la Industria dejando en claro el compromiso del sector como socio estratégico de este país.

Entonces, IATA ya había manifestado su preocupación con respecto a la percepción adicional del 25% para los pasajes internacionales y sobre los consumos con tarjetas de crédito y débito en el exterior cuando superen los US$300 al mes.

Llamado a funcionarios y legisladores

“Argentina viene perdiendo competitividad frente a sus pares de la región. Las autoridades deberían considerar que, tras finalizar la temporada de verano en el hemisferio sur, muchos operadores aéreos podrían reconsiderar su capacidad y sus frecuencias al país. La decisión de añadir nuevos cargos aumenta los costos para el viajero, repercutiendo en la demanda y afectando el desarrollo del transporte aéreo y el turismo, que generan miles de puestos de trabajo y aportan al crecimiento económico para todo el país. Es el momento de que el Gobierno y sus legisladores reconozcan la gran contribución de la aviación y no los ingresos vía impuestos y tasas,” enfatizó Cerdá.

IATA

Para IATA el mercado tiene las condiciones para recuperarse y crecer en los próximos años, dado que los argentinos viajan en promedio solo 0,61 veces per cápita por año por debajo de países como Panamá y Chile. Por eso es necesario aplicar otra clase de políticas que ayuden a que más argentinos viajen, insisten.

“La industria tiene la predisposición de seguir apoyando a la Argentina en su recuperación socioeconómica. Tenemos que trabajar junto al Gobierno en una agenda que permita al sector contar con la capacidad para seguir creciendo de manera sostenible y eficiente, preservando la conectividad y los beneficios vitales que ofrece la industria,” concluyó Cerdá.


Imagen de portada: Florencia Carbone