La Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) señaló que la producción de la industria manufacturera de las pequeñas y medianas empresas aumentó en febrero un 4,8% interanual, a precios constantes, y un 1,2% respecto de enero.
Asimismo, la capacidad instalada se redujo 0,9% respecto de enero (ronda el 71,7%), por lo que febrero fue el segundo mes en el que se combinaron progresión en la producción con menos uso de instalaciones, un fenómeno que se explica por mayores niveles de inversiones en diferentes sectores industriales, especialmente en Alimentos y Bebidas.
“Este febrero estuvo muy afectado por las subas de costos. Las demoras en las entregas de insumos por parte de los proveedores y dudas de algunas empresas al momento de aceptar nuevos pedidos de producción, por temor a incumplir con los tiempos de entrega, se ubican entre los patrones observados. También algunas firmas adelantan el stock de fabricación. Para las empresas exportadoras, las exigencias de los clientes sobre plazos y costos generan incertidumbre”, indicó la CAME en un comunicado.
El índice de producción
Los resultados forman parte del Índice de Producción Industrial Pyme (IPIP) que elabora CAME, con una muestra que alcanzó unas 372 industrias pyme a nivel federal.
La mejor performance en la comparación anual durante febrero se registró en el rubro Maderas y Muebles (+9,2%) y la peor en el de Papel e Impresiones (-7%). De los seis sectores medidos, 4 finalizaron con crecimiento y 2 con bajas en la producción: Alimentos y Bebidas (+8,1%); Metal, maquinaria y material de transporte (6,9%); Químicos y Plásticos (5,3%), y Textiles e Indumentaria (-5,1%).
Alimentos y Bebidas
La producción tuvo un aumento de 8,1% anual en febrero y de 2,8% mensual a precios constantes. De esa forma, acumula un desarrollo de 6,6% en los primeros dos meses del año. El uso de la capacidad instalada bajó de 80,1% en enero a 73,5% en febrero, siendo uno de los sectores con más inversiones.
“Hubo buena demanda y las empresas manifestaron no poder tomar todos los pedidos por falta de capacidad de producción y recursos humanos para ampliar la oferta”, señala el informe.
Por otro lado, el sector Textil e Indumentaria no logra repuntar: en febrero la producción cayó otro 5,1% anual y suma una baja de 4,4% en los primeros dos meses del año frente al mismo periodo de 2022. El uso de la capacidad instalada subió 1,4 puntos, a 73%.
En tanto, el rubro de Madera y Muebles vio un aumento en la producción del 9,2% anual en febrero y 3,5% mensual, a precios constantes.
“En los primeros dos meses del año lleva un crecimiento de 7,4% anual. El uso de la capacidad instalada aumentó 2,6 puntos, a 75%, esperable porque el sector viene realizando inversiones desde meses anteriores y viene de un 2022 muy complejo. Desde las firmas manifiestan que tienen pedidos realizados para los próximos seis meses que, al menos en materia de producción, les aseguran un buen 2023″, amplía el trabajo.
Metales, Químicos y Papel
Asimismo, en el sector de Metal, Maquinaria y Material de transporte vio un progreso anual del 6,9% a precios constantes y 1,2% mensual. En el primer bimestre del año creció 6,3% frente a igual período de 2022. “El sector usó 2,4 puntos más de su capacidad instalada que en enero, alcanzando el 69,9%. Las empresas están trabajando bien, con la demanda activa, aunque con muchas dificultades por el encarecimiento de costos de los primeros dos meses del año. Se suman demoras en las entregas de insumos, que algunas empresas adjudican a proveedores que especulan con los precios. El buen desempeño exportador de la industria automotriz de los últimos meses tracciona a algunos proveedores locales”, explicaron0
En Químicos y Plásticos la producción creció 5,3% en febrero. “El ramo sigue muy afectado por las subas de las materias primas y la falta de financiamiento accesible para recambio de maquinaria”, señalaron, tras agregar que, por ejemplo, en el rubro de Papel e Impresiones la actividad se redujo 7% anual, acumulando en el primer bimestre del año una caída de 6,7%.
“Las empresas esperaban que febrero fuese un buen mes, de la mano del inicio del ciclo lectivo especialmente, pero no ocurrió. Ahora las expectativas están puestas en el impacto del ciclo electoral”, indicaron.