Maersk lanzó el primer servicio ferroviario “transiberiano” el pasado sábado, con una formación que partió desde desde el puerto de San Petersburgo rumbo a Japón.
El servicio llevará cargas de Europa rumbo a Asia y forma parte del nuevo servicio intercontinental de la naviera danesa, que prevé un tiempo de tránsito de entre 23 y 32 días, lo que supone prácticamente la mitad del tiempo en comparación con los 52 a 27 días que insume la ruta oceánica tradicional.
El tren, cargado de madera contrachapada y productos químicos, salió de la terminal portuaria báltica hacia la terminal VSC del puerto de Vostochniy, en el extremo oriente ruso (ambas terminales forman parte del grupo Global Ports). A su llegada a Vostochniy, los contenedores se cargarán en buques de short sea shipping hasta Corea y Japón.
Complementario
Maersk puso en marcha este servicio en asociación con los socios rusos Modul y Global Ports, para ofrecer un producto complementario para las cargas más sensibles al tiempo que se mueven entre Asia y Europa, conectando los puertos de Vostochniy y San Petersburgo en Rusia. Este supone una solución de entrega más rápida que el transporte transoceánico a un coste más bajo que la carga aérea.
Hasta ahora, el servicio se ha utilizado sólo para los envíos hacia el oeste desde Asia a Europa, y fue lanzado por primera vez en 2019.
“Sin embargo, la demanda en dirección este, especialmente en sectores como automoción, tecnología y productos químicos, ha llevado a la puesta en marcha de este servicio”, afirmó Kasper Krogh, jefe de Ferrocarriles Intercontinentales de AP Moller-Maersk.
El próximo embarque en dirección este desde San Petersburgo se realizará el 8 de abril, y a partir de entonces se realizará cada quince días.