Cuando se le pregunta qué motivó el proyecto en el que propone crear la Comisión Administradora del río Paraná, la diputada nacional Blanca Osuna (Frente de Todos-Entre Ríos) responde que es indispensable generar una instancia para abordar de manera integral las políticas ambientales, económicas y sociales para el río.

Durante una entrevista con Trade News, Osuna explicó que es prioritario regular el uso del Paraná con fines sanitarios, turísticos, productivos y comerciales, con el objetivo de “proteger un recurso indispensable como es el río, y promover su cuidado con perspectivas de desarrollo sostenible”.

La iniciativa propone crear una comisión administradora integrada por representantes de las seis provincias que atraviesa el Paraná (Entre Ríos, Misiones, Corrientes, Chaco, Santa Fe y Buenos Aires), uno designado por el Poder Ejecutivo nacional. Y también la puesta en marcha del Consejo de Participación Comunitaria Ribereña y de un Fondo de Compensación Ambiental.

Emergencia hídrica

-¿Cómo y por qué surgió la idea del proyecto?

-El río Paraná ha estado en el último tiempo en boca y presencia de distintos ámbitos por el tema de la bajante y de la culminación de la concesión de la hidrovía.

Blanca Osuna

El gobierno nacional declaró la emergencia hídrica y un grupo de diputados que provenimos de provincias que son solidarias al curso del río consideramos necesario prestarle atención con políticas coordinadas e integrales que atiendan esta situación de emergencia, y que más allá de eso se registre como competencia la protección y conservación de la biodiversidad del río y sus humedales.

Es uno de los ríos más importantes del mundo. Es clave para el aprovisionamiento doméstico de agua y para la producción, y es muy importante contemplar la gestión de residuos y efluentes cloacales, analizar la realidad de sus recursos pesqueros y de la diversidad de su zona costera con sus bosques y monte nativo.

Estructura y financiación

-Atender todos esos temas es muy importante y difícilmente alguien los cuestione, las dudas surgen respecto de la creación de otra instancia burocrática con los costos que eso implica. ¿Cómo imagina la estructuración, funcionamiento y financiamiento de la nueva comisión?

-Por un lado creo que el costo de tener una instancia de coordinación que contempla vincular ámbitos con los que ya cuenta el Estado hace que no hablemos de algo excepcional.

Pero otra parte nos llama la atención que existen por ejemplo la Comisión Regional del río Bermejo, el comité de cuenca del Juramento y el Salado, de la Laguna La Picasa, del río Colorado, de la cuenca de los ríos Neuquén, Limay y Río Negro, un comité interjurisdiccional de la región hídrica de la llanura pampeana, del río Chubut y del Pilcomayo; una Comisión Administradora del río Uruguay y la del río de la Plata.

-Las dos últimas tienen estructura independiente, con funcionarios y presupuestos propios, ¿cómo imagina la implementación de la comisión para el Paraná?

-Creo que hay que pensar desde una perspectiva diferente porque una cosa son los ríos donde el cauce se comparte con otros países, que son cuencas internacionales como el caso del Uruguay y del río de la Plata, que dependen de Cancillería pero las provincias participan, y otra son estos ámbitos de comité de cuenca, que sería lo más parecido a lo que imaginamos tiene que ser una comisión administradora del río Paraná, donde participen las provincias que están a la vera del río, desde Misiones hasta la provincia de Buenos Aires, y al mismo tiempo haya una referencia nacional que vaya generando ese ámbito de coordinación de políticas.

Unificar criterios

Esto es indispensable y fundamental. Hoy todos estamos preocupados por la situación del río. Está la declaración de emergencia y el debate del uso del río en cuanto canal fluvial para el transporte. No podemos tener miradas compartimentadas sobre un mismo bien natural de grandísima dimensión, de los más grandes del mundo, cuya cuenca es además un flujo de agua dulce de altísimo valor en el que se realimentan acuíferos, donde están el delta y el pre delta como parques y bellezas naturales.

-No termina de quedarme en claro cómo sería la estructura de la comisión y qué efectos tendrían sus recomendaciones o decisiones.

-Por eso damos el ejemplo de cómo funcionan los comités de cuenca, pero creo que hay un punto de partida que es muy importante: la Constitución nacional define para las provincias el dominio de los recursos naturales, por lo que estamos hablando de un ámbito donde quienes son propietarios de un bien natural lo administran coordinadamente.

Y donde existen políticas diversas sobre ese mismo bien pero que no están coordinadas, y doy el ejemplo de lo que son los recursos ictícolas. La captura de especies como el sábalo hace que cíclicamente haya debates sobre el riesgo que corre esa especie, que además es una especie de base que alimenta a otras. Una provincia establece veda total, otra parcial, otra nada.

La histórica bajante del río Paraná dejó al descubierto parte de la estructura que protege al Túnel Subfluvial que une las ciudades de Santa Fe y Paraná.

Hidrovía

Si revisamos políticas sanitarias… hace unos días un diario de Rosario publicó un título que era algo así como: “Todos los inodoros de Rosario vuelcan en el río Paraná”. Eso significa que una de las ciudades más importantes del país no tiene tratamiento de efluentes cloacales. ¿Tiene que ser eso una resolución de Rosario y no de Corrientes, o sí de Paraná y no de Santa Fe? ¿O es que hay que tener una mirada integral?

¿Qué pasó con la hidrovía? Creemos que es un tema que el Gobierno está decidido a superar.

-¿Superar en qué sentido?

-El canal de hidrovía atendía hasta el puerto de Rosario, pero nosotros, en Entre Ríos, tenemos los puertos de Ibicuy y Diamante, que quedaron fuera del canal troncal, desatendidos. Lo mismo pasó con Barranqueras en Chaco.

-¿Fue así por una decisión de la empresa o porque estaba previsto en el pliego?

-¿Las razones? Se priorizó el desarrollo de lugares con mayor concentración y además se fomentó esa concentración, porque lo que pasó una vez que la empresa Hidrovía empezó a funcionar con esa definición es que cuando se privilegia un lugar, ese lugar tiene más desarrollo.

Participación provincial

Estoy haciendo un reporte de temas y es ahí cuando los legisladores de la región nos preguntamos: primero, ¿por qué el río Paraná no tiene el mismo tratamiento de comité de cuenca como otros ríos siendo que es el más importante de la Argentina? ¿Por qué las provincias que tienen el dominio no se dedican a coordinar esto? ¿Por qué el río Paraná está atendido como parte de una cuenca -la cuenca del Plata- junto con el Paraguay, Iguazú, Uruguay y el río de la Plata? Eso depende de Cancillería, donde las provincias, además, no participan activamente.

El río forma parte de una cultura de las ciudades, tiene que ver con el deporte, el turismo, la música, la producción literaria. Tiene que ver con una identidad y eso es lo que hace que entendamos que el enfoque que merece el río debe ser integral.

A todos nos interesa que se resuelva de la mejor manera el uso del río como un canal fluvial de transporte, pero también que se cuide su fauna, biodiversidad y bosque nativo. ¿Eso lo hace cada provincia como pedazos, o por la dimensión y el impacto, por ser espacio de carga del acuífero guaraní y tener bienes naturales de tanto valor merece tener una atención integral? Como legisladores proponemos eso. Queremos sumarnos a un debate de fondo en relación al río.

Los pasos en el Congreso

-¿Cómo siguen los tiempos del proyecto?

-Presentamos el proyecto en la Cámara con la firma de legisladores de la región. Tiene giros a la Comisión de Ambiente, a la de Presupuesto y Hacienda, y a la de Asuntos Marítimos y Fluviales. Estamos intercambiando y en interacción con los ejecutivos de las provincias y el nacional sumándonos a una etapa que el mismo Presidente con excelente criterio abrió para decir que en materia de hidrovía o de lo que sería el uso del canal troncal para transporte vamos a darnos un año para elaborar una propuesta con participación de las provincias.

Ahí es donde sumamos al preguntar: ¿solamente como canal de transporte? ¿No es una excelente oportunidad para tener una mirada y políticas integrales sobre el río Paraná?

-Entonces de alguna forma este proyecto va interactuar o a influir en el próximo llamado de licitación de la hidrovía…

-Por supuesto, pero también con la preocupación de que todos los que vivimos en la costa del río tenemos cuando vemos al río en estas condiciones, con problemas de captación de agua para el uso doméstico.

Bajante récord

-Es la bajante más importante en los últimos 77 años, pero la gran preocupación es que a las subidas y bajadas que antes eran cíclicas ahora se antepone una tendencia a la baja. ¿A qué se debe esto y qué puede hacerse para revertirlo?

-Hay dos tendencias: una, a naturalizar diciendo que esto es un comportamiento que forma parte de los ciclos del río y hay estudios que demuestran que tiene estas bajantes graves.

La otra es que si comparamos la realidad del río y sus costas de hace 70 años con la actual, era absolutamente otra, y no sólo por el volumen poblacional sino por otros elementos como las prácticas extractivas, el uso de agroquímicos/agrotóxicos que no era natural entonces, y eso ha afectado al río como nos afecta a las personas.

Ahora están en curso estudios que darán cuenta de algunos elementos como el calentamiento global, la destrucción de bosque y selva nativa, los 51 embalses y represas que tiene el río en su curso superior en jurisdicción de Brasil.

Hay elementos como para decir que no estamos en iguales condiciones que hace 70 años. Han pasado muchas cosas que afectan a este bien natural y es hora de que reaccionemos en concordancia y no compartimentándolo en pedazos y diciendo: hablemos de navegación por acá, de ambiente por allá, de efluentes por otro lado.