El Puerto de Quequén firmó con la dragadadora belga Jan de Nul el contrato de profundización a 50 pies de la terminal porutaria y su mantenimiento por los próximos 7 años, en un acto realizado el viernes pasado en la Bolsa de Cereales de Buenos Aires.
El presidente del consorcio portuario, Arturo Rojas, junto con el gerente para Argentina de Jan de Nul, Bob Michta, señaló que “la profundización nos va a hacer más competitivos. Vamos a bajar costos; recuperar mercaderías del hinterland; y en definitiva generar desarrollo y trabajo de manera directa e indirecta, apostando a que vengan más inversiones a nuestro puerto”.
“Nuestro puerto es pionero en llevar adelante una obra pública financiada por el aporte del sector privado y financiada por los bancos privados”, destacó Rojas, que estuvo acompañado además por el gerente general del puerto, Mario Goicoechea, gerentes de las terminales portuarias de Quequén y referentes del sector agroexportador.
Por su parte, Michta expresó la relevancia que tiene la obra al “garantizar por 7 años el calado de Puerto Quequén”. “No quedan dudas, habrá previsibilidad por los próximos siete años. Además, pensamos comenzar la profundización en octubre o noviembre y terminarla en unos cuatro meses”, señaló el ejecutivo belga.
Jan de Nul utilizará en los trabajos una draga de corte y una de succión. “La obra de profundización la realizará la draga cortadora Ibn Battuta, una de las más potentes en el mundo –la tercera en potencia en la flota global de la empresa- junto con la draga de succión en marcha Vitus Bering. En este momento, se encuentran trabajando en Latinoamérica, y para finales de este año los trasladaremos hacia Quequén”, explicó Michta.
“Este próximo paso va a abrir las puertas a muchas inversiones. También es la prueba que hoy se pueden hacer inversiones en Argentina, completamente financiadas por el sector privado”, subrayó el gerente de Jan de Nul.
Transparencia y competencia
Rojas destacó el proceso de la licitación por la transparencia que rodeó el proceso: “Las empresas pudieron ser parte de la confección del pliego aportando su expertise. Hubo un data room, en diciembre, transmitido online, y más de 370 documentos publicados en nuestra web. Todo ello, nos permitió finalizar el proceso sin ninguna observación ni impugnación por parte de las empresas”, expresó.
Fueron tres los oferentes calificados en la licitación pública internacional. Jan de Nul ganó con la oferta más económica: 12% de diferencia con la oferta más cara y un 27% menos en la tarifa del dragado de mantenimiento que se viene realizando en los últimos tres años.

La draga de corte IBN Battuta realizará las obras de profundización

La draga de succión Vitus Bering acompañará en las obras de profundización