Los productores agrícolas podrían percibir hasta 5 dólares adicionales por tonelada de la mano de la ampliación de la hidrovía Paraná-Paraguay, la principal vía de salida de la cosecha de granos de la Argentina.

Así concluye un informe del Instituto de Desarrollo Regional (IDR), que coteja la experiencia recogida en la Argentina en las últimas 10 campañas agrícolas –luego de la última ampliación de la vía navegable– con estudios realizados por asociaciones de productores de soja de los Estados Unidos y el Gobierno norteamericano, a partir de obras de profundización en sus ríos y el impacto directo percibido por los farmers.

“Hasta ahora, los estudios sobre la hidrovía Paraná-Paraguay no se concentraron lo suficiente en el primer eslabón de la cadena logística y comercial, que es el productor”, explica el informe del IDR, que analizó cómo la última profundización de la vía navegable obró como catalizador del aumento de las hectáreas sembradas y de las toneladas cosechadas.

Datos salientes

Tomando como base las últimas 10 campañas de soja, maíz y trigo, que siguieron a la última ampliación de la hidrovía (2005/06 a 2016/17) de 32 a 34 pies, el informe concluyó que:

  • Se incorporaron 9 millones de hectáreas a la producción.
  • Se incrementó en 55 millones de toneladas la cosecha.
  • Se registró un crecimiento anual compuesto del 5,11%.

“Esto equivale a unos US$ 10.300 millones de valor agregado a la producción agrícola”, indica el estudio, si se considera el valor de la cosecha del año previo a la ampliación (2005/06) versus la última campaña (2018/19).

Entre sus conclusiones, el estudio destaca que “las mayores economías logradas por el complejo agrícola no habrían sido tales si el principal factor de la competitividad logística –la vía navegable– no se hubiera profundizado”, argumentan.

Beneficio económico para el productor

Estos datos se complementan con otro informe del IDR realizado en 2017, cuya conclusión excluyente es que “una profundización de la hidrovía permitiría un aumento de la producción del 6% anual, acumulativo”.

“Podemos realizar esta proyección porque hemos comprobando lo sucedido en el pasado tras una profundización: cada año creció la producción un 5,11% cada año”, agrega.

“Estudios realizados en los Estados Unidos demuestran que una ampliación de sus vías navegables interiores les permitirían a los productores recibir 5 US$/TN adicionales”, informa el IDR.

“Por las condiciones de competencia y las similitudes con la hidrovía, la mencionada proyección de beneficios adicionales para los productores de soja de los Estados Unidos puede trasladarse directamente al productor argentino”, destaca el IDR, tras aclarar “que estos 5 dólares adicionales por tonelada que podría percibir el productor local son antes de las retenciones”.

Es decir, el beneficio que lograrían los farmers de 5 dólares adicionales por tonelada son replicables entre los productores argentinos (si profundiza la hidrovía como Estados Unidos lo hace con el río Mississippi) porque se trata del mismo producto, exportado a los mismos mercados, con iguales precios y embarcados en buques similares. La única diferencia reside en los derechos de exportación aplicados en la Argentina.

Beneficios para transportistas

Con una mayor producción, los camiones, principalmente, y los trenes moverán una mayor cantidad de toneladas también gracias al “efecto dominó” de una “autopista fluvial mejorada”, recibiendo asimismo mayores ingresos.

Siguiendo los mismos parámetros (desde la ampliación de la hidrovía hasta la campaña 2017/18) se requirieron un total de 12,1 millones de viajes internos, terrestre o ferroviario.

Por lo tanto, con una nueva ampliación de la vía navegable puede proyectarse para los próximos 10 años un efecto acumulado de 2,2 millones viajes agregados a la demanda actual de transporte terrestre y ferroviario.

“En otras palabras, se duplica el trabajo del transporte del año pasado en 10 años”, añadió el informe.

Beneficios en puertos y buques

Un volumen adicional de 55 millones de toneladas logrado en la producción impactaron asimismo en los ingresos por elevación de granos en los puertos y por fletes adicionales para los buques.

De esta manera, por cada pie adicional que se agregue a la hidrovía, los buques podrán cargar 1600 toneladas más por viaje. Ciertos buques (Supramax) podrán salir a bodega completa y evitar así las demoras y costos de completar carga en otros puertos.

Por cada viaje, el ahorro por buque asciende a los US$ 187.000 (en un buque de 60.000 toneladas). Es más, al ganar en eficiencia en la navegación (por obras de infraestructura que eliminarían las actuales restricciones) cada buque podría ahorrar entre 30.000 y 40.000 dólares adicionales.