El Subcomité de Diseño y Construcción de Buques (SDC 9) de la Organización Marítima Internacional (OMI), aprobó un proyecto de directrices revisadas para la reducción del ruido subacuático de los buques mercantes con el fin de hacer frente a los efectos adversos sobre la vida marina.

El proyecto de directrices reconoce que el transporte marítimo comercial es uno de los principales contribuyentes al ruido submarino radiado (URN por su sigla en inglés) que tiene efectos adversos sobre las funciones vitales críticas para una amplia gama de vida marina, incluidos los mamíferos marinos, peces y especies de invertebrados, de los que muchas comunidades indígenas costeras dependen para su alimentación, medios de vida y culturas.

Herramientas

De acuerdo con un comunicado de la OMI, el proyecto ofrece una visión general de los enfoques aplicables a los diseñadores, constructores y operadores de buques para reducir el ruido submarino radiado de cualquier buque. Su objetivo es ayudar a las partes interesadas a establecer mecanismos y programas que permitan reducir el ruido.

Antecedentes

El proyecto de directrices revisó las directrices anteriores (publicadas en 2014). Las mismas contienen conocimientos técnicos actualizados, incluida la referencia a normas internacionales de medición, recomendaciones y reglas de sociedades de clasificación. También proporcionan plantillas de muestra para ayudar a los propietarios de buques con el desarrollo de un plan de gestión del ruido radiado subacuático.

El nuevo proyecto de directrices se presentará para su aprobación al Comité de Protección del Medio Marino (MEPC 80) en su próxima reunión, entre el 3 y el 7 de julio.


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